La instalación para Workplace 3.0 Milán 2017 plantea un nuevo enfoque para el diseño de los espacios de trabajo. Hoy en día tanto las oficinas como las ciudades, se definen como “smart”. Sin embargo sería atrevido atribuirlo a una cuestión únicamente de la tecnología: Smart es una nueva calidad de vida, un nuevo humanismo en el que las personas son el protagonista activo. Garantizar espacios para el trabajo individual y colaborativo ya no es suficiente, es necesario activar una nueva relación basada en la confianza (confianza creativa), “trust&sharing”.
Una nueva revolución cultural se está llevando a cabo donde el diseño está al servicio de la humanidad con el fin de producir felicidad. Un enfoque antropocéntrico al proyecto: la antropodesign, entendida como una forma de lenguaje del pensamiento, la actividad de la mente, una síntesis de la intuición, la imaginación, la invención, la innovación, el dispositivo de sentido.
Workplace 3.0 Milán, “A Joyful Sense at Work” – el concepto
“A Joyful Sense at Work” nace de un proceso de investigación, intercambio y cooperación llevado a cabo por personas de una amplia gama de disciplinas y tiene como objetivo delinear y sentar las bases para un nuevo enfoque de diseño de los espacios de trabajo, volviendo a elaborar la teoría de la oficina y la planificación del espacio de trabajo.
Hoy en día, saber leer y escuchar las necesidades debe ser la piedra angular del diseño en el que la superación de las reglas y la definición de unas cuantas variables simples, pueden definir el nuevo espacio de trabajo como un organismo de adaptación, más flexible y con capacidad de re-diseñarse al instante. Por tanto, el proyecto sostenible es aquel que satisface las necesidades, expectativas y derechos del individuo. En este contexto, el diseñador se convierte en un mediador de necesidades, capaz de diseñar espacios completos y terminados, que de la misma manera están inacabados, son adaptables y resilentes.
La instalación “A Joyful Sense at Work” ha servido como punto de partida de un viaje que nos traslada al SaloneUfficio 2017. Diseñada como un experimento en la forma y la función con el ser humano como parte central y que nos identifica de una manera diferente, priorizando las emociones antes que las funciones.
Hoy en día pensar en oficinas smart simplemente en términos de desarrollo de las nuevas tecnologías no es suficiente: “smart” es también una nueva calidad de vida, un enfoque antropocéntrico del diseño, un nuevo humanismo y una nueva revolución cultural que aprovecha el diseño para las necesidades del ser humano en un intento de generar felicidad.
El mundo de las oficinas atraviesan tiempos de grandes retos. No sólo los productos se renuevan, también cambian la forma de concebir el trabajo y los espacios.
